Entendiendo Los Casos De Menores Necesitados De Atención (CINC)
Acerca
Acerca de los casos de niños necesitados de cuidados (CINC)
Los casos de niños necesitados de cuidados (CINC) son una parte especial de la ley que se ocupa de la protección de los niños que se encuentran en situaciones vulnerables. Estos casos surgen cuando un niño ha sido lastimado, descuidado o vive en condiciones peligrosas, y el gobierno da un paso al frente para asegurarse de que esté seguro y bien. El objetivo principal es cuidar de los niños que han sido maltratados o descuidados y también ayudar a sus familias a superar los problemas que podrían separarlos.
Los casos de CINC tienen como objetivo proporcionar las normas legales y el apoyo adecuados para proteger los derechos del niño y lo que es mejor para él. Diferentes personas, como trabajadores sociales, abogados y el sistema judicial, trabajan juntos para garantizar que el niño esté seguro y reciba la atención que necesita. Los casos de CINC utilizan procedimientos legales para mantener a los niños a salvo de cualquier daño y darles un lugar lleno de amor en el que crecer. El objetivo es asegurarse de que los niños estén bien cuidados y tengan una buena oportunidad de crecer sanos y felices.
Lo que usted necesita saber
El Tribunal Supremo de Luisiana desempeña una función de supervisión en los casos de menores necesitados de cuidados (CINC). La principal responsabilidad del tribunal es garantizar que el proceso legal que involucra a los niños sea justo y que se dé prioridad al interés superior del niño.
El Tribunal Supremo de Luisiana supervisa el sistema CINC para garantizar la protección de los derechos de los niños implicados en estos casos y la obtención de una representación legal adecuada. El tribunal establece normas y estándares para garantizar la equidad y la coherencia en la tramitación de los casos CINC en todo el estado.
En los casos de CINC, los niños tienen derecho a tener un abogado que los represente. El Tribunal Supremo tiene un programa para asegurarse de que reciben ayuda legal. Esto es importante porque garantiza que se atiendan las necesidades e intereses del niño en el tribunal. Sin embargo, otras personas involucradas en el caso, como los cuidadores, no pueden contratar a sus propios abogados. Esto se debe a que el sistema quiere que el abogado del niño sea independiente y se centre en lo que es mejor para el niño. A veces esto puede ser un problema si un cuidador quiere contratar a un abogado, lo que podría no encajar con la forma en que se hacen las cosas normalmente.
En los casos de CINC, el tribunal decide qué casos debe hacer en lugar de que las personas los presenten por su cuenta. Estos casos suelen involucrar al Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS), que es una organización separada que se ocupa del bienestar de los niños. El DCFS trabaja en casos tanto fuera del tribunal como en el proceso judicial cuando se trata de la protección de los niños.
En los casos de CINC, las áreas de servicios designados son importantes. Estas áreas son establecidas por el Tribunal Supremo de Luisiana para cada programa de CINC. Deciden el alcance y los límites del trabajo del programa, asegurándose de que los servicios enviados sigan las normas legales y las necesidades de esa área. Esta es una parte crucial para tratar los casos de CINC y dar la ayuda y el apoyo adecuados a los niños y las familias involucradas.
En los casos de CINC, el estándar de representación es realmente importante, especialmente cuando se trata de lo que quiere el niño. Este estándar garantiza que la voz del niño y lo que quiere se tomen en serio durante el proceso legal. El abogado o representante designado para hablar en nombre del niño escucha sus deseos e intenta incluirlos en las decisiones en la medida de lo posible. La perspectiva y los deseos del niño son fundamentales para determinar la mejor manera de cuidarlo y proteger sus derechos. El Estándar de Representación destaca la importancia de escuchar activamente y considerar lo que el niño quiere en los casos de CINC.
Los resultados en los casos de CINC son diferentes para cada situación. Al tomar decisiones, el tribunal tiene en cuenta diferentes puntos de vista, como lo que quiere el niño y lo que dice su abogado. Por lo general, los niños quieren estar con sus familias, pero a veces no es seguro para ellos quedarse allí. El tribunal tiene que pensar en lo que es mejor para el bienestar general del niño. Aunque el tribunal toma la decisión definitiva, realmente se preocupa por lo que quiere el niño y lo que más le conviene.
En los casos de CINC, pueden suceder diferentes cosas dependiendo de lo que esté pasando. Estos son algunos resultados posibles:
- Adopción: El niño puede formar parte de una nueva familia de forma permanente.
- Reunificación: Se pueden hacer esfuerzos para devolver al niño a sus padres biológicos o cuidadores principales en caso de que sea seguro y lo mejor para el niño.
- Tutela/custodia: otro adulto responsable puede recibir la autoridad legal para cuidar del niño.
- Finalización de la tutela: cuando un niño alcanza cierta edad (normalmente 18 o 21), puede dejar de estar bajo tutela y tener que cuidar de sí mismo. También puede recibir programas como el de tutela ampliada.
- Muerte: Por desgracia, en algunos casos, el niño puede fallecer durante el proceso, lo que conlleva sus propios problemas legales y emocionales.
Es importante recordar que el resultado de un caso de CINC se decide en función de la situación individual. Se tienen en cuenta lo que es mejor para el niño y su bienestar, con el objetivo de proporcionarle un lugar seguro y acogedor donde vivir. Cada caso es diferente, y el tribunal examina lo que será bueno para ese niño en particular.
En los casos de CINC, las audiencias suelen ser privadas, lo que significa que el público en general no puede asistir. Solo las personas directamente involucradas en el caso, como las partes, sus abogados y el personal del tribunal, pueden estar presentes. Esta privacidad es importante para mantener la información del niño y de la familia confidencial y segura. Ayuda a garantizar que las discusiones y decisiones acerca del bienestar del niño se hagan de manera privada y enfocada por las personas que deben participar.
Hay dos tipos de casos de niños necesitados de cuidados (CINC), cada uno con sus propias características:
- En casa con los padres - Casos de Servicios Familiares (FS): Estos casos involucran a niños que permanecen en sus propios hogares con sus padres o cuidadores principales. Los casos de FS comienzan cuando hay preocupaciones acerca de la seguridad o el bienestar del niño, pero el tribunal cree que esas preocupaciones pueden abordarse mientras el niño permanece en casa. En los casos de FS, el tribunal vigila para asegurarse de que la familia reciba la ayuda que necesita y toma las medidas necesarias para mantener al niño seguro y bien en casa.
- Casos de acogida: Por otro lado, los casos de acogida son acerca de niños que son sacados de sus hogares debido a preocupaciones sobre abuso, negligencia u otras situaciones peligrosas. Estos niños son colocados con familias de acogida o en centros de acogida. El tribunal tiene un papel importante en estos casos. Vigilan dónde se coloca al niño, se aseguran de que esté bien y deciden los planes a largo plazo, como intentar devolver al niño a su familia o buscar otras opciones permanentes, como la adopción o la tutela.
Es importante saber que ambos tipos de casos se centran en mantener al niño seguro, bien y hacer lo mejor para él. Pero las cosas específicas que suceden y la ayuda que se brinda dependen de si el niño se queda en casa o va a un hogar de acogida.
La duración de un caso de CINC puede variar significativamente dependiendo de varios factores, incluyendo la complejidad del caso y las circunstancias específicas involucradas. Los casos de CINC suelen implicar procedimientos legales para determinar si un niño debe ser retirado de su hogar o si debe permanecer bajo el cuidado de sus padres o tutores. Estos casos pueden implicar múltiples audiencias, evaluaciones, investigaciones y la participación de diversos profesionales, como trabajadores sociales, abogados y jueces. Mientras que algunos casos de CINC pueden resolverse con relativa rapidez, otros pueden prolongarse durante varios meses o incluso años. Los casos de CINC pueden tratarse de forma diferente en cada caso y puede haber variaciones en los procesos legales y los plazos correspondientes.
Proceso general de los casos de niños necesitados de cuidados (CINC)
Acerca del proceso general para casos de niños necesitados de cuidados (CINC)
En los casos de niños necesitados de cuidados (CINC), el tribunal decide que un niño necesita ayuda para estar seguro y bien. El tribunal piensa en diferentes formas de hacerlo y elige la opción que sea mejor para la salud y seguridad del niño.
El proceso CINC sigue un plan general, pero es importante saber que no siempre se hace en línea recta. Estos pasos pueden cambiar según lo que ocurra en cada caso.
El proceso suele comenzar cuando alguien informa de sus preocupaciones acerca del bienestar del niño a los Servicios de Protección Infantil. A continuación, el Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS) investiga para ver si el informe es cierto y si el niño está seguro. En función de lo que encuentren, el DCFS decide qué hacer para mantener al niño a salvo. Si el niño está en peligro inmediato, el DCFS puede tomar medidas de emergencia como sacarlo de casa o encontrar un lugar seguro para él.
Otros problemas a considerar en casos de menores necesitados de cuidados (CINC)
Antes de que comience un proceso formal de niño que necesita cuidados (CINC), a veces las personas intentan resolver las cosas a través de acuerdos de ajustes de carácter informal. Estos acuerdos también se denominan servicios voluntarios o resoluciones informales, y tienen como objetivo tratar las preocupaciones acerca del bienestar del niño sin involucrar al tribunal.
En ciertas situaciones, las agencias de bienestar infantil como el Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS) pueden trabajar con los padres o tutores legales del niño para establecer un acuerdo de ajustes de carácter informal. Este acuerdo establece cosas específicas que los padres acuerdan hacer por su cuenta para abordar las preocupaciones planteadas por la agencia.
El propósito de estos acuerdos es dar a las familias la oportunidad de lidiar con los problemas identificados, mejorar sus habilidades parentales, obtener el apoyo que necesitan y crear un entorno seguro para el bienestar del niño. El objetivo es evitar la necesidad de acudir a los tribunales e iniciar un caso formal de CINC.
Los términos del acuerdo de ajustes de carácter informal pueden ser diferentes para cada caso. Pueden incluir cosas como asistir a asesoramiento o a clases para padres, tener reuniones regulares con la agencia de bienestar infantil o hacer cambios específicos en el hogar para hacerlo más seguro.
Es importante entender que, aunque estos acuerdos están pensados para ser voluntarios y cooperativos, tienen consecuencias legales. En caso de que los padres no cumplan los términos del acuerdo, podría dar lugar a iniciar un proceso formal de CINC.
En los casos de niños que necesitan cuidados (CINC), es posible solicitar órdenes de restricción temporales (TRO) y órdenes de restricción permanentes dentro de la jurisdicción del tribunal para hacer el caso.
Las órdenes de restricción temporales (TRO) son órdenes a corto plazo emitidas por el tribunal para enviar protección inmediata a un niño que se cree que está en peligro inmediato o en riesgo de sufrir daños. Las TRO se conceden normalmente en situaciones de emergencia sin una audiencia completa o en presencia de la parte contraria. Ofrecen una reducción inmediata hasta que se pueda llevar a cabo una audiencia completa.
Por otro lado, las órdenes de restricción permanentes son medidas a más largo plazo que pueden emitirse después de una audiencia o juicio completo en el que ambas partes tienen la oportunidad de presentar sus pruebas y argumentos. Las órdenes de restricción permanentes se emiten normalmente cuando el tribunal determina que hay pruebas suficientes que respaldan la necesidad de protección continua del niño.
En los casos de niños necesitados de cuidados (CINC), el tribunal suele evaluar los derechos de los padres para determinar qué es lo mejor para el niño. Al tomar decisiones, tienen en cuenta diferentes factores relacionados con los padres.
Un factor importante es la capacidad de los padres para cuidar del niño. El tribunal examina en qué medida pueden satisfacer las necesidades físicas, emocionales y de desarrollo del niño. Consideran aspectos como las habilidades de los padres para criar a sus hijos, su comprensión de las necesidades del niño y su historial de presentar una atención adecuada.
El tribunal también examina si los padres pueden establecer un hogar seguro y estable para el niño. Evalúan las condiciones de vida, asegurándose de que no existan riesgos o peligros que puedan dañar al niño. También consideran factores como la estabilidad financiera y el acceso a recursos adicionales.
Además, el tribunal considera si los padres están dispuestos a abordar los problemas que llevaron a la separación del niño. Esto podría implicar acudir a programas de asesoramiento o rehabilitación, seguir los servicios ordenados por el tribunal y participar activamente en el establecimiento y seguimiento de un plan de caso.
En última instancia, el principal objetivo del tribunal es lo que es mejor para el niño. Quieren asegurarse de que el niño esté seguro, bien cuidado y pueda desarrollarse adecuadamente. Para ello, evalúan cuidadosamente los derechos y capacidades de los padres, determinando en cada caso si son capaces de presentar la atención necesaria para el niño.
La extinción de la patria potestad es un proceso legal independiente en Luisiana que se produce cuando se determina que los padres no pueden reunirse con su hijo. Es un proceso serio y complejo que puede ocurrir en ciertos casos. La agencia de bienestar infantil, DCFC, puede presentar una petición para extinguir la patria potestad.
Terminar los derechos de los padres significa poner fin de forma permanente a la conexión legal entre los padres y sus hijos. Suele hacerse cuando existen serias preocupaciones acerca de la capacidad de los padres para enviar un entorno seguro y afectuoso. Estas preocupaciones pueden incluir abuso continuo, negligencia, problemas de abuso de sustancias, problemas de salud mental o falta de progreso o cooperación con los servicios ordenados por la corte o planes de caso.
Para apoyar la petición de terminación, la agencia o las partes autorizadas deben presentar pruebas sólidas. Estas pruebas se recopilan a través de investigaciones, documentación de preocupaciones, estimaciones e informes de trabajadores sociales, terapeutas y otros profesionales involucrados en el caso.
El tribunal, teniendo en cuenta el interés superior del niño, examina las pruebas y decide si se deben revocar los derechos parentales. En caso de revocación, la relación legal entre los padres y el niño finaliza de forma permanente. El niño puede entonces recibir adopción, tutela o acogida a largo plazo, dependiendo de la situación y de las opciones disponibles.
En los casos de menores necesitados de cuidados (CINC), el objetivo principal es encontrar una situación permanente y estable que sea la mejor para el niño en cuestión. El objetivo es llegar a un acuerdo a largo plazo que favorezca el bienestar del niño. Esto puede incluir diferentes opciones como la reunificación del niño con su familia biológica, la adopción, la tutela o la colocación con un familiar o una familia de acogida.
El tribunal desempeña un papel fundamental en estos casos al considerar qué es lo mejor para el niño. Analizan cuidadosamente aspectos como la seguridad del niño, sus necesidades emocionales, su crecimiento y desarrollo, y la estabilidad de su situación. El objetivo del tribunal es encontrar la mejor y más sostenible solución para el cuidado y el bienestar del niño.
Intentan que el niño vuelva con su familia biológica si es posible. Esto puede implicar ofrecer servicios de apoyo a los padres, como asesoramiento, terapia, clases para padres o ayuda con el abuso de sustancias, para que puedan abordar los problemas que causaron la separación del niño. El tribunal vigila de cerca el progreso de los padres y comprueba si pueden presentar un entorno seguro y afectuoso para el niño.
Si no es posible o no redunda en el interés superior del niño volver con su familia biológica, se buscan otras opciones. Se puede considerar la adopción si queda liberado que el niño se beneficiaría de una nueva familia permanente. Se puede establecer la tutela en caso de que encuentren un cuidador adecuado que no sea uno de los padres, pero que pueda proporcionar al niño cuidados y estabilidad a largo plazo. Si es la mejor opción para el bienestar del niño, podrían colocarlo con un familiar o en una familia de acogida.
Las decisiones del tribunal siempre giran en torno a lo que es mejor para el niño, asegurándose de que tenga un hogar seguro, estable y afectuoso.
Si no es seguro que un niño se quede con su familia biológica, el tribunal es responsable de encontrar un lugar adecuado para que viva. Consideran diferentes opciones, como hogares de acogida, cuidado por familiares o hogares grupales, y siempre priorizan lo que es mejor para el niño.
Al examinar las diferentes opciones, el tribunal comprueba cuidadosamente si son adecuadas. Los hogares de acogida son una opción, en la que cuidadores especialmente capacitados y con permiso prestan atención y apoyo temporal al niño. El tribunal se asegura de que el hogar de acogida cumpla con todas las normas necesarias y proporcione un entorno seguro y afectuoso para el niño.
Otra opción es el cuidado por familiares, en el que el niño va a vivir con parientes o miembros de la familia extensa. El tribunal examina la estabilidad y capacidad de estos parientes y si están dispuestos a proporcionar un buen hogar para el niño. Colocar al niño con la familia puede ayudar a mantener las conexiones con sus parientes y darle una sensación de familiaridad y apoyo.
En ciertos casos, si el niño necesita cuidados o servicios especializados, el tribunal podría considerar la posibilidad de colocarlo en un hogar grupal o en un centro residencial. Esta decisión depende de las necesidades específicas del niño y de si existen recursos y apoyo adecuados disponibles en esos lugares.
El tribunal siempre tiene en cuenta el interés superior del niño durante todo el proceso. Examina las diferentes opciones de colocación teniendo en cuenta aspectos como la seguridad, el bienestar emocional, el desarrollo y la posibilidad de estabilidad y crecimiento del niño.
Cuando se cambia la ubicación de un caso de CINC, normalmente significa que el niño va a ser trasladado de un lugar de residencia a otro. Antes de que se produzca un cambio de ubicación, el tribunal y el DCFS evalúan la situación del niño. La evaluación tiene en cuenta factores como la seguridad y el bienestar del niño, y la idoneidad de la ubicación actual. Sobre la base de esta estimación, se toma la decisión de iniciar un cambio de ubicación en caso de que se determine que es lo mejor para el niño.
Una vez tomada la decisión, se desarrolla un plan para facilitar la transición a la nueva ubicación. Esto incluye identificar y evaluar posibles opciones de ubicación, como hogares de acogida, cuidado por familiares o centros residenciales, en función de las necesidades del niño. Se notifica el cambio de ubicación previsto al niño y a las partes pertinentes, como los padres o tutores.
Se prepara al niño para el cambio de ubicación, lo que puede implicar servicios de asesoramiento o apoyo para ayudarle a comprender y adaptarse a la nueva forma de vida. Se hacen los arreglos necesarios para que el niño sea trasladado a la nueva ubicación, garantizando su seguridad y bienestar durante la transición.
Después del cambio de ubicación, se supervisa periódicamente el bienestar y la adaptación del niño. Los asistentes sociales, los trabajadores sociales u otros profesionales que participan en el cuidado del niño continúan evaluando la idoneidad y estabilidad de la nueva ubicación. Se pueden llevar a cabo audiencias de revisión para garantizar que se satisfagan las necesidades del niño y para abordar cualquier inquietud que pueda surgir.
Otros problemas a considerar
Pasos del proceso de cuidado de niños necesitados (CINC)
La audiencia inicial de 72 horas en un caso de niño que necesita cuidados (CINC) es un paso muy importante en el proceso legal. Ocurre poco después de que un niño sea sacado de su hogar o cuando hay preocupaciones urgentes por su seguridad. Esta audiencia prepara el escenario para lo que sucederá a continuación en el caso.
El objetivo principal de la audiencia de 72 horas es revisar por qué el niño fue sacado del hogar y decidir sobre los arreglos de custodia temporal.
Si el niño sigue con sus padres, la audiencia examina si el niño está seguro y bien en casa. El tribunal reflexionará sobre la situación y decidirá si el niño puede quedarse con sus padres o si es necesario adoptar medidas de protección.
Si el niño ha sido separado de sus padres, la audiencia se centra en el lugar donde se alojará temporalmente. El tribunal comprobará si el lugar actual es adecuado, buscará cualquier riesgo o preocupación y decidirá qué debe suceder a continuación para cuidar del niño.
En la audiencia de 72 horas participan diferentes personas, como el juez, los abogados que representan al niño, los padres o tutores legales, el Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS) y otras personas relacionadas con el caso.
Durante la audiencia, el tribunal escucha lo que todos tienen que decir. Se enteran de por qué se llevó al niño fuera de casa, si el niño está seguro en este momento, qué ayuda o servicios inmediatos necesita y cuál es el plan para el lugar donde se colocará al niño.
El tribunal toma las decisiones basándose en toda la información. Si el niño está con sus padres, el tribunal examina las condiciones del hogar, si los padres pueden mantener al niño a salvo y si existe algún peligro urgente para el niño. Si el niño ha sido retirado, el tribunal piensa acerca de por qué se lo llevaron, si el lugar actual es seguro y adecuado para él y si el estado necesita seguir ayudando a proteger al niño.
Durante la audiencia de 72 horas, el tribunal también podría hablar acerca de una orden de plan de seguridad. Este es un plan que indica cómo mantener al niño seguro mientras está bajo custodia temporal. Podría incluir cosas como límites en el contacto o las visitas, la necesidad de supervisión u otras reglas basadas en lo que está sucediendo en el caso.
La decisión del tribunal en la audiencia de 72 horas depende de la situación. Si el niño está con los padres, el tribunal puede decir lo que debe hacerse para mantenerlo a salvo mientras esté con ellos. Si el niño ha sido retirado, el tribunal decide si el acuerdo de custodia temporal debe continuar, por ejemplo, si el niño debe quedarse con un familiar o ir a un hogar de acogida. También elaboran un plan sobre lo que sucederá a continuación con el cuidado, las visitas y los servicios del niño.
La oficina del fiscal de distrito, en nombre del Departamento de Servicios para Niños y Familias de Luisiana (DCFS), solicitará formalmente la intervención del tribunal para proteger y cuidar al niño enviando una petición. La petición incluye información verificada acerca del abuso o negligencia encontrada durante la investigación. Presenta pruebas y argumentos para acreditar que el niño se encuentra en una situación vulnerable y necesita la ayuda del tribunal para su seguridad y bienestar.
Los padres obtienen una copia de la petición y tienen 15 días para responder. Durante este tiempo, pueden revisar las acusaciones, hablar con un abogado si lo desean y preparar su propia respuesta. Pueden admitir o rechazar las acusaciones, enviar sus propias pruebas o argumentos, o solicitar acciones o resultados específicos en el caso. Es importante que los padres o tutores legales respondan a la petición de CINC dentro del plazo establecido. Si no responden a tiempo, el tribunal puede tomar decisiones sin su opinión.
Una vez presentada la petición, se programará una audiencia judicial para abordar las alegaciones y preocupaciones. El tribunal revisará las pruebas del fiscal del distrito y podrá tener en cuenta las aportaciones de otras personas implicadas, como los padres o tutores legales del niño, para decidir si el niño debe ser declarado CINC.
Si el niño ha sido retirado de su hogar, la petición debe presentarse en un plazo de 30 días. Si se ha establecido un plan de seguridad en lugar de la retirada, la petición debe presentarse en un plazo de 45 días. Si la petición no se presenta dentro de estos plazos, el niño puede ser devuelto a su hogar o el plan del caso puede ser terminado automáticamente.
Después de la audiencia de 72 horas y la presentación de la petición, se programa una audiencia de respuesta. Durante esta audiencia, todas las personas involucradas, incluidos los padres o tutores legales, responden a la petición y comparten sus pensamientos y argumentos acerca de dónde debe ser colocado el niño y qué otras opciones podrían considerarse. El tribunal examina cuidadosamente las pruebas, escucha los argumentos de todos y luego toma una decisión basada en lo que es mejor para el niño.
La audiencia de respuesta tiene como objetivo garantizar que todos tengan la oportunidad de hablar y compartir sus opiniones acerca de lo que debería suceder con el cuidado del niño. Ayuda al tribunal a comprender la situación en su totalidad y a tomar decisiones inteligentes que mantendrán al niño seguro y bien.
Si los padres están de acuerdo o admiten las alegaciones de la petición, el niño puede ser reconocido oficialmente como un «Niño que necesita cuidados», y entonces el tribunal puede seguir adelante con la audiencia de declaración de inmediato. Sin embargo, si los padres rechazan las alegaciones y no están de acuerdo con lo solicitado, tienen derecho a presentar objeciones a las acusaciones. En este caso, se programa una audiencia de adjudicación para determinar si las alegaciones son ciertas o no.
Cuando los padres dicen que las acusaciones acerca de que su hijo necesita cuidados no son ciertas, significa que no están de acuerdo y no creen que su hijo necesite ayuda o protección.
Audiencia de adjudicación
En esta situación, el tribunal organiza una audiencia de adjudicación. Durante esta audiencia, ambas partes presentan sus pruebas y argumentos. Las personas que hacen las acusaciones (normalmente los servicios de protección de menores o el Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS, por sus siglas en inglés)) y los padres tienen la oportunidad de compartir su información y argumentos. El objetivo es averiguar si las acusaciones son creíbles y si el niño realmente necesita cuidados.
Durante la audiencia de adjudicación, ambas partes presentan sus pruebas, que incluyen declaraciones de testigos, documentos y cualquier otra información importante que respalde sus posiciones. El tribunal examina detenidamente las pruebas, reflexiona sobre la fiabilidad de los testigos y toma una decisión sobre lo que es mejor para el niño. El tribunal también considera la seguridad y el bienestar del niño como factores muy importantes a la hora de tomar su decisión.
En caso de que el tribunal encuentre pruebas suficientes que respalden las acusaciones, decidirá que el niño es un niño que necesita cuidados (CINC, por sus siglas en inglés).
Cuando los padres aceptan o admiten que su hijo necesita ayuda, están aceptando que existen preocupaciones acerca del bienestar de su hijo. Entienden los problemas y están dispuestos a trabajar con el tribunal y el sistema de bienestar infantil para garantizar la seguridad y el cuidado de su hijo.
En este caso, el tribunal reconocerá formalmente al niño como un «Niño que necesita cuidados». Esto significa que el tribunal reconoce que el niño requiere apoyo y protección debido a problemas como abuso, negligencia o situaciones perjudiciales. Es la forma que tiene el tribunal de decir que deben intervenir para garantizar que el niño reciba los cuidados y la protección necesarios.
Después de la adjudicación, el tribunal pasa a una audiencia de disposición. La audiencia trata de averiguar qué se debe hacer para ayudar al niño y mantenerlo a salvo. El tribunal examina diferentes aspectos, como la gravedad de las preocupaciones, la edad y el desarrollo del niño y la situación de la familia.
Durante la audiencia de disposición, el tribunal puede dar órdenes y tomar decisiones acerca de dónde debe vivir el niño, qué servicios necesita y cómo debe ser supervisado. El objetivo es enviar el apoyo y la ayuda adecuados para mejorar las cosas para el niño y hacer lo que sea mejor para él. Dependiendo de lo que el niño y la familia necesiten, el tribunal puede ordenar cosas como asesoramiento, terapia, apoyo educativo o que el niño permanezca en un hogar de acogida durante un tiempo.
Durante la audiencia de disposición, se establece un plan de caso. Este plan explica los servicios específicos, la ayuda y las cosas que los padres o cuidadores deben hacer para abordar los problemas que llevaron a que el niño fuera reconocido como CINC. El plan de caso se hace para mantener al niño a salvo, ayudarlo a que le vaya bien y, en el mejor de los casos, reunir a la familia si es posible.
Cuando se determina que un niño necesita cuidados, su salud y seguridad son los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de decidir qué debe suceder a continuación. El tribunal puede tomar diferentes decisiones, como:
- Permitir que el niño se quede con uno de sus padres u otra persona adecuada, pero con las condiciones específicas que sean mejores para el niño.
- Colocar al niño en una institución o agencia privada o pública que pueda cuidarlo.
- Enviar a un niño con una enfermedad mental a una institución especial para personas con enfermedades mentales.
- Otorgar la tutela del niño a alguien que no sea su padre o madre.
- Tomar cualquier otra decisión o combinación de decisiones que el tribunal considere mejor para el niño. El tribunal debe elegir la opción que le dé más libertad al niño, sin dejar de mantenerlo a salvo y velar por sus intereses.
El tribunal solo separará a un niño de sus padres en caso de que no haya otra forma de garantizar que el niño esté seguro y bien cuidado. Separar a un niño de sus padres se considera un último recurso, y el tribunal hará todo lo posible para evitarlo.
Una vez que el tribunal haya tomado una decisión acerca de lo que debe suceder con un niño, escribirá todos los detalles en una sentencia de disposición. Esto incluye
- La decisión específica que se tomó acerca del cuidado y la situación del niño.
- Cuánto tiempo durará la decisión, con una duración máxima especificada.
- La agencia, institución o persona que será responsable de cuidar al niño, junto con cualquier otra agencia o persona involucrada en la prestación de servicios al niño según lo determine el tribunal.
- Cualquier condición o regla adicional que deba seguirse en función de la decisión.
El tribunal también debe enviar explicaciones por escrito para aprobar o rechazar cualquier plan del caso. En caso de que el tribunal considere que los planes del caso no protegen adecuadamente la salud y la seguridad del niño o no son lo mejor para él, debe explicar las razones de su decisión. La orden de disposición permanecerá en vigor hasta que el niño cumpla 18 años, a menos que tenga una fecha de vencimiento específica mencionada en ella.
Cuando un niño es retirado del hogar de sus padres, es importante que se celebren audiencias de revisión periódicas como parte del proceso. La primera audiencia de revisión suele tener lugar unos seis meses después de que el niño sea retirado. El propósito de la audiencia es comprobar cómo van las cosas en relación con las preocupaciones que llevaron a la retirada del niño y ver si el niño está seguro y le va bien en su nuevo lugar.
Después de eso, se programan más audiencias de revisión con regularidad, normalmente cada seis meses o según lo decida el tribunal. Estas audiencias son como puntos de control para vigilar cómo le va al niño. La frecuencia de las audiencias puede cambiar dependiendo de la situación y de lo bien que vayan las cosas en el cumplimiento de los objetivos descritos en el plan del caso.
Los padres o tutores legales son notificados acerca de las audiencias de revisión. Se espera que asistan y proporcionen actualizaciones, hablen sobre su progreso en la resolución de los problemas identificados y participen en la decisión de lo que es mejor para el futuro del niño. Es importante que los padres se involucren activamente y participen en el proceso para acreditar que se preocupan por el bienestar de su hijo.
Cuando se permite que un niño regrese a casa con sus padres durante la fase de disposición de un caso de niño que necesita cuidados (CINC), no significa que el caso haya terminado automáticamente. La decisión del tribunal de permitir que el niño regrese a casa se basa en lo que es mejor para el niño en ese momento, pero el caso puede continuar.
Incluso si el niño regresa a casa, puede haber un seguimiento y supervisión continuos para garantizar su seguridad y bienestar. El tribunal puede exigir un plan de caso que describa las condiciones, servicios o intervenciones específicas para apoyar la seguridad y el crecimiento continuos del niño en el hogar.
El tribunal puede programar más audiencias de revisión para comprobar el progreso de los padres y el bienestar del niño. Estas audiencias garantizan que se aborden los problemas que llevaron a que el niño fuera considerado un CINC y que el niño esté seguro y bien en casa.
La frecuencia de estas audiencias de revisión puede variar, pero a menudo se celebran cada tres o seis meses. Son como puntos de control para ver cómo van las cosas con los padres y para asegurarse de que el niño está seguro y bien en casa. El tribunal examina los informes, recibe actualizaciones de los trabajadores sociales u otros profesionales involucrados, y escucha las aportaciones del niño, los padres y otras personas involucradas.
Además de las audiencias de revisión, la agencia de bienestar infantil o los trabajadores sociales asignados también pueden realizar un seguimiento y supervisión continuos. Esto es para comprobar que los padres están cumpliendo con los requisitos y condiciones del plan del caso y que se está cuidando del bienestar del niño. Los trabajadores sociales pueden visitar el hogar, hablar con la familia y evaluar las condiciones de vida, la seguridad y el desarrollo general del niño.
Es importante saber que las órdenes del tribunal y la frecuencia de las audiencias de revisión y supervisión pueden depender de factores como la gravedad de las preocupaciones, el progreso de los padres y la estabilidad general del hogar. El objetivo es seguir apoyando y supervisando las cosas para garantizar la seguridad, el bienestar y la estabilidad a largo plazo del niño dentro de la familia cuando sea lo mejor para él.
Se celebra una audiencia de permanencia para tomar una decisión definitiva acerca de lo que sucederá con un niño que necesita cuidados (CINC). La principal prioridad del tribunal es el interés superior del niño, y el objetivo final suele ser reunir al niño con sus padres, en caso de que sea seguro y adecuado.
Esta audiencia debe celebrarse en un plazo de 12 meses después de que el niño haya sido retirado de su hogar. Si el niño fue retirado antes de una audiencia de disposición, la audiencia de permanencia puede tener lugar después de 9 meses. El tribunal determina un plan permanente para el niño que sea más apropiado y en el mejor interés del niño.
Las revisiones de permanencia se seguirán llevando a cabo al menos una vez cada 12 meses después de la primera audiencia de permanencia hasta que el niño sea colocado permanentemente. Si procede, se puede calendarizar una audiencia de revisión del caso y una audiencia de permanencia juntas.